Naranjas valencianas tomadas con una Polaroid. Autora:Teresa Arana Cacho

Las clásicas cámaras instantáneas Polaroid vuelven a irrumpir en las calles de Valencia. El mundo analógico reaparece con fuerza, reivindicando las sorpresas de la baja tecnología y la emoción del instante. ¿Os acordáis de las Polaroid? Son cámaras fotográficas analógicas e instantáneas, que revelan la foto en el momento en que disparas.

Las cámaras Polaroid son objetos extraños y hermosos, artilugios de un futuro que ya pasó. Encuadras, aprietas el botón, el papel sale de la cámara y la imagen se revela ante tus propios ojos. Cuando los químicos se oxidan para dar paso a los colores y la imagen empieza a tomar forma, es un momento mágico. Es ahí cuando toda una serie de factores que afectan a la fotografía para conseguir una pieza única: luz, temperatura… Las fotografías instantáneas absorben lo que les rodea en el momento en que el papel surge de la cámara, por eso sentimos una conexión tan fuerte con estos objetos fotográficos. Es un instante maravilloso capturado y sellado en el célebre marco blanco.

Rescatadas del fondo del cajón o compradas de segunda mano, cada vez son más quienes que se deciden a redescubrir las posibilidades gráficas y artísticas de estas legendarias máquinas instantáneas. Con una Polaroid, el resultado es siempre sorprendente.

Instantánea de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia. Autor: Daniel González

Valencia nos parece una ciudad especialmente adecuada para las Polaroids. La cantidad de paisajes, gentes y motivos de todo tipo hace que vayas por la calle descubriendo constantemente nuevos motivos de amor instantáneo. Y no sólo en la ciudad. Las playas, la Albufera o la huerta son también lugares que parecen pedir a gritos que los fijes en los químicos de una fotografía instantánea.

La luz de Valencia también es una pasada. Tiene un montón de variaciones a lo largo del año y de cada momento del día. Si es verdad que las cámaras Polaroid convierten cada instante en un objeto único, esto es especialmente cierto en Valencia, donde la luz cambiante y envolvente hace que cada momento sea irrepetible. Además, las temperaturas suaves durante todo el año hace que técnicamente todo sea más fácil, reduciendo los problemas con el revelado.

Dicen que el amor verdadero se fotografía en analógico. Valencia, también. Por eso un grupo de valientes acaba de poner en marcha el proyecto Polaroids en Valencia para recopilar fotografías instantáneas tomadas en la tierra de las naranjas, la luz y el color. Hay ciudad, playa, gente y, cómo no, muchos naranjos. Echad un ojo a su tumblr y su flickr. Si queréis participar, podéis enviarles vuestras polaroids de Valencia a través de su facebook.

Pareja con la Plaza de Toros de Valencia de fondo. Autor: Alejandro Cámara

Pero ¿puede aún encontrarse papel para estas cámaras? ¡Sí! Polaroid cesó la producción hace años, pero Impossible Project ha vuelto a poner en funcionamiento una fábrica abandonada para producir una vez más papel instantáneo, salvando así a millones de cámaras en perfecto estado de funcionamiento de quedar obsoletas.
Vale, pero, este nuevo papel para cámaras Polaroid ¿se puede encontrar en Valencia? ¡Sí! Lo tienen en Gnomo Lifestyle Shop. Puedes comprarlo online o ir a su tienda en el barrio de Ruzafa, en la calle Dénia 12 de Valencia.

¿No conservas tu vieja Polaroid? ¡No hay problema! En Gnomo tienen también antiguas cámaras Polaroid restauradas por Impossible Project. Son cámaras originales, revisadas y reparadas para que vuelvan a estar en perfecto estado de funcionamiento, igual o mejor que el primer día.
Aventurarse en el universo analógico de las Polaroid es disfrutar del azar, abrirse a lo inesperado y descubrir de formas de ver la ciudad hasta ahora insospechadas. “Importa poco no saber orientarse en una ciudad. Perderse, en cambio, como quien se pierde en el bosque, requiere práctica.”